Expertos abogan por potenciar la investigación en fármacos contra la sordera
Un grupo de investigadores de la facultad de medicina de la ciudad norteamericana de Kansas presenta este mes un estudio en el que defiende que con un mayor conocimiento fisiológico del oído interno y de las causa moleculares de la enfermedad del oído interno es posible desarrollar nuevos productos terapéuticos que se puedan administrar de manera local, de forma cercana al paciente.
Y es que a pesar de la gran incidencia en la población que tienen las enfermedades relacionadas con el oído, como el tinnitus o la pérdida de audición, no existe en la actualidad ningún tratamiento farmacológico disponible destinado exclusivamente a solventar estas dolencias. Por otro lado, como indican los investigadores, sí existe un amplio desarrollo en cuanto a fármacos para tratar diversas enfermedades del oído que causas efectos adversos, como la pérdida auditiva neurosensorial o la disfunción en el equilibrio.
La pérdida auditiva puede ser de origen genético o adquirido. Entre las causas externas de defectos auditivos, la Organización Mundial de la Salud (OMS) señala enfermedades como la rubeola materna, o la meningitis. Asimismo, el uso de medicamentos ototóxicos y la exposición a ruidos o sonidos excesivamente altos son otras de los factores que pueden provocar problemas en la salud auditiva.
