El desarrollo de un tumor en el oído puede provocar hipoacusia

El desarrollo de un tumor en el oído puede provocar hipoacusia

Tumores en los oídos
Rate this post

El crecimiento de un tumor en el oído puede generar una pérdida de audición en la persona afectada. Aunque se trata de un tipo de tumor poco frecuente, debe ser diagnosticado de forma precoz para evitar un impacto en la calidad de vida del paciente. Esta hipoacusia puede venir acompañada de vértigo, mareos o alteraciones del equilibrio. Según la Sociedad Española de Otorrinolaringología y Cirugía de Cabeza y Cuello (SEORL-CCC), estos tumores se clasifican en función de su localización. Te explicamos sus diferencias y en qué se basa su diagnóstico y tratamiento.

Como punto de partida, tanto en el oído como en el hueso temporal, parte de la base del cráneo, se pueden desarrollar lesiones malignas o benignas. Las lesiones benignas, que son más frecuentes, pueden provocar hipoacusia y otros problemas de salud, como disfonía o problemas oculares. Por ello es importante acudir al especialista desde que se detecta cualquier disfunción en el sistema auditivo.

Tumores malignos en el oído y el hueso temporal  

En lo que respecta a lesiones malignas, el carcinoma epidermoide o de células escamosas del conducto auditivo externo (CAE) es el más prevalente. Entre los factores de riesgo se encuentra, en primer lugar, la inflamación persistente causada por la otitis media crónica. Una infección que debe ser tratada de forma adecuada para evitar complicaciones en el futuro. A ello se suman la exposición a rayos ultravioletas, sustancias químicas o la predisposición genética, entre otros.

Por el contrario, la aparición de tumores en el oído medio es muy poco frecuente. Dado que, al igual que ocurre con los tumores benignos, los primeros síntomas son generales y comunes con otras patologías, como una pérdida de audición o la supuración del oído, es complicado realizar un diagnóstico precoz de este tipo de tumores. Su principal complicación es el desarrollo de parálisis facial en un 50% de los pacientes en un estado avanzado de la enfermedad.

En el oído medio también puede aparecer el rabdomiosarcoma, un tumor raro que afecta sobre todo a los niños de menos de 10 años. También en este caso la otitis recurrente será una señal de alerta. A pesar de ello, tras su diagnóstico suele ser controlable en la mayoría de los niños con enfermedad localizada.

El tratamiento para los diferentes tumores debe ser valorado por un equipo multidisciplinar en base a la clínica de la enfermedad y según las características del paciente. Aunque en algunos casos la hipoacusia remite al tratar el tumor, en otros el paciente puede tener que convivir con esta pérdida de audición.

Qué hace en caso de una pérdida de audición

En primer lugar, es esencial realizar un seguimiento continuado del estado de salud de los oídos, tanto para prevenir una reaparición del tumor, como para garantizar la mejor calidad de vida para el paciente. Además, recomendamos seguir las siguientes pautas:

  • Hacer uso de audífonos. Los audífonos son la principal herramienta de ayuda a la audición. Tras un breve proceso de adaptación, permiten recuperar el nivel de audición habitual. Entre sus beneficios se encuentran además la prevención de la demencia y la depresión y la mejora de la concentración y el rendimiento laboral de los usuarios.
  • Mantener una adecuada higiene de los audífonos y los oídos. Los audífonos han de estar siempre libres de cerumen y secos. En cuanto a los oídos, recuerda no introducir ningún objeto punzante.
  • Evitar el abuso de medicamentos ototóxicos que pueden empeorar la pérdida de audición al dañar las estructuras del oído.
  • Apoyarse en amigos y familiares. Es importante comunicar a tu círculo más cercano tu situación para que te apoyen y te ayuden en tu día a día. Sabiéndolo, pueden realizar pequeños actos que faciliten la comunicación, como hablar más alto, vocalizar mejor o facilitar la lectura de labios.

 

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.